sábado, 22 de noviembre de 2008

Sábado por la tarde



"El hecho de respirar, a menudo, está infravalorado. Especialmente en los tiempos que corren. Inspirar y espirar. Inspirar y espirar.

Escribe a tus amigos. Concentra a las tropas. Rompamos algunos límites."

DA http://darrenaronofsky.blogspot.com/

martes, 18 de noviembre de 2008

La vejez y sus costumbres



Ocho y media de la noche. Doce horas fuera de casa y la mochila en mi espalda parece pesar el doble que esta mañana. No es que cargue más peso, es que mis fuerzas flaquean, y cuando entro en el autobús, 90 céntimos por un asiento, me encuentro en la coyuntura de cederle mi sitio al pobre anciano que se ha subido tras de mí y que sin duda ha visto el esfuerzo de mi espalda reflejado en mi cara. Él no ha pagado más que yo, él no usa bastón o muleta y, por las circunstancias, él se ha convertido en Sansón (aunque su calvicie pudiera decir lo contrario) mientras que yo podría formar equipo con sus compañeros de parchís y acabar convertida en carne de cañón, expuesta sin miramientos a sufrir cualquier clase de daño. Exhausta. Pero aún así me ha mirado y murmullado, y sin saber lo qué ha podido mascullar entre dientes o dentaduras, como si suyos fueran los poderes divinos, me he levantado y sonriente le he cedido mi asiento, avanzando así por los episodios de la falsedad, la resignación, el enojo, la rabia, el resentimiento y el odio, la construcción afectiva de mayor riesgo para nuestra salud emocional que sin duda acabará por destruirme antes de llegar a casa e irradiará despojos sobre quien quiera que me rodee hasta que transcurra el tiempo necesario para rebobinar y transformar la sonrisa fingida de aquel autobús en un gesto de ciudadanía y respeto que me harán sentir orgullosa hasta que la peripecia vuelva a repetirse.

Los mayores creen estar licenciados en la escuela de la experiencia con el derecho de ejercer su profesión y supremacía en cualquier ámbito de la vida cotidiana. Si es en la consulta del médico sus casi 7 años de estudios y tantos más de práctica se quedan reducidos a un "y este que va a saber, ahora le dan el título a cualquiera, sabré yo lo que me conviene y lo que no" ; si es en la calle frente a un grupo de chavales que recaudan dinero para su viaje de estudios, sus esfuerzos se verán recompensados con un "lo siento joven, no tengo monedas ahora mismo, la pensión es pequeña y mi doctor, que es un incompetente, me saca los cuartos en su consulta privada" ; si es la hora de comer y se habla de política "estos gobernantes de hoy en día no saben lo que hacen, así va el país, así la economía, es la perdición hija, la perdición" ; y no olvidemos su afición por los documentales de la 2, los programas de prensa rosa y la teletienda que siempre ocupan sus horas de ocio porque "hoy en día no hay nada interesante en la televisión y todas las películas son de violencia o de sexo, muy desagradable hija, muy desagradable". Me quedan aun por nombrar los espacios verdes en pueblos y ciudades, y no me refiero a los parques y jardines sino a las reuniones de jubilados en zonas estratégicas desde las que airear su vergüenza con comentarios de mal gusto a jovencitas inocentes que ni por asomo podrían pensar que los contemporáneos de sus abuelos se comportarían de tal manera. Y por último los bares, insignias clave del orgullo nacional por su deporte rey: el fútbol. Gritos e improperios conjuran contra la pantalla como si de esa manera descargaran el descontento acumulado durante más de 60 años... La vejez y sus costumbres donde la tragedia no es ser viejo sino que ya nunca más se será joven.

jueves, 6 de noviembre de 2008

Cásate conmigo



De nuevo en mi camino de vuelta a casa me encontré prestando atención a uno de esos escaparates llenos de instantáneas capaces de resaltar nuestros peores defectos: una tienda de fotografía. Y allí los hombres y mujeres en parejas de 2, una de blanco y el otro de negro con las caras de la felicidad más real, pura y... jajaja, eso no me lo creo. Os explicaré por qué.

Sí, sí, sí quiero; así es como comienza ese gran día; así es como comienzan todas las grandes historias de una vida adulta. Ahora plantearé ciertas preguntas al respecto:

- pregunta número uno: ¿por qué el hombre es quién propone y la mujer quién dispone? Realmente me considero una persona de mente abierta pero para ver como un individuo XX se sienta a esperar como su pareja XY (también barajo las opciones XX-XX, XY-XY, pero de eso hablaremos otro día) le propone matrimonio, opino que sobra mucho espacio en mi amplitud de miras. Mujeres del mundo, enterrad los días en que vuestras caderas se movían al compás del duro trabajo de los hombres que alimentaba y mantenía a la familia. Si queréis casaros, decidlo, tiraos en paracaídas y escribid en él lo primero que se os ocurra para que todo el mundo pueda leerlo.

- pregunta número dos: ¿por qué si no crees en Dios te empeñas en que la Iglesia oficie la ceremonia? ya sé lo que todo el mundo contestaría a esta pregunta: "es que quiero hacerlo de blanco", "es que menudo disgusto se lleva mi madre si un cura no bendice mi santa unión", "es que ya le prometí a mi sobrino que llevaría las arras"... Quiero imaginarme como persona atea el día de mi boda en una de esas iglesias: detrás de mi 300 personas y delante un hombre vestido con ridículas túnicas que pretende hacerme cumplir como deber en el matrimonio todo lo que está escrito en el libro más vendido de la historia que yo nunca leeré y que además está decidido a hacerme creer que aquello que un tal Dios ha unido ya nunca lo podrá separar el hombre. Para más inri, he de pasarme casi una hora entera haciendo cruces en el aire y cuando por fin siento que mi estómago afectado por los nervios del "gran día" se asienta, el hombre de las túnicas me hace comer una oblea diminuta que según parece es el cuerpo de un tal Cristo que ni tiene cabeza, ni piernas ni nada de nada. Dirán que el día de mi boda fumé mariguana o bebí todas las botellas de vino que me quedaban, pero juro por el aire que respiro que ese día no podré parar de reírme. Hombres y mujeres del mundo, alquilad un gran salón, ponedle bancos y una alfombra roja, vestid al concejal como os plazca y montad un gran espectáculo, pero por favor, sed fieles a vuestras creencias.
- pregunta número tres: ¿por qué marido y mujer? si la unión se celebra entre dos cónyuges heterosexuales, de ella él será su marido y de él ¿ella será su mujer? A pesar de que sea una expresión tan ancestral como nos podamos imaginar, nadie ha dicho que deba perdurar, menos aún cuando en ella atisbo cierta hegemonía del varón sobre su recién estrenada esposa, ¿no es cierto?

- pregunta número cuatro: ¿por qué una orquesta? si mi edad ronda los 30 y al igual que mis amigos más cercanos en mi tiempo libre escucho rock americano, post grunge, pop inglés, rock español... ¿por qué he de contratar a 7 músicos que entonen toda una noche melodías de los 80 y pasodobles de los 60? Supongo que será porque en mi boda, a los invitados "equivocados" les gusta la música equivocada. De esta manera lanzo al aire una nueva cuestión:
- pregunta número cinco: ¿por qué he de invitar a mi boda a 300 personas? ¿acaso mi pareja y yo tenemos tantos amigos? por supuesto que no. Está de más permitir que toda esa gente sea testigo de uno de los días "más felices" de mi vida. No se alegrarán por mi sino por la comida, llenarán mi nueva casa de regalos insustanciales que seguramente podrían formar parte del ajuar de mi futura hija y me obligarán a comportarme de forma hipócrita durante casi 12 horas mientras finjo saber quienes son, me intereso por lo bien que lo pasábamos cuando aún teníamos 18 años o presto atención sobre sus historias acerca de lo que han hecho los últimos 10 lustros de su vida.

Y es así como el día en que haré feliz a unos cientos no podré celebrar mi alegría con unos pocos, los pocos que realmente sabrían apreciarla. Porque todo lo demás no importa.

--> Escuchando: The Kills - "Cheap and cheerful"

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Un voto para Obama

¿Qué clase de realidad representaría si hoy 5 de Noviembre eludiera la victoria del primer hombre afroamericano en la historia que ocupará durante los próximos 4 años la Casa Blanca? Y es que siendo los Estados Unidos la capital del mundo en el que vivo y ya que sin quererlo hemos delegado el poder de elección de quien gobernará nuestras vidas (a nivel general, claro) en los hombres y mujeres (mujeres y hombres) del "Dios bendiga a América", que menos que mostrar cierto interés en lo que el futuro demócrata nos depara. ¿Por qué Barack Obama? Desde un punto de vista culto, civilizado y carente de doble moral, lo extraño sería hacerse una pregunta cargada de tanta obviedad, pero ¿qué ha llevado a todos los Simpsons, McDonalds y tios Sam a su elección? ¿Por qué un presindente negro? ¿Por qué demócrata y no republicano? Pongámonos en situación y presentemos a quienes responderán estas cuestiones:



Bien, ahora que sabemos que "ellos" ganaron la guera de Vietnam, ahora que Fidel Castro se dedica a la música, ahora que los triángulos no tiene lados, ahora que Irán, Corea del Norte y Francia comparten territorios con Australia, ahora que Neil Amstrong era ruso y que ya hemos pasado por 3 guerras mundiales, mostremos la inyección motivacional que les guiará hacia las urnas:




"Personalmente me gusta más la estética de los 2 primeros, no sé, quizá por la música, los colores...Obama es un tipo atracticvo, es negro...sí, por eso debería votarle"

Y así el 4 de Noviembre Barack Obama fue proclamado presidente de los Estados Unidos de América.

Bueno, y ahora que ya me he extendido e ironizado lo suficiente, no pienso que los 300 millones de habitantes estadounidenses estén cortados por el mismo patrón, ni si quiera puedo echar por tierra los progresos del país tecnológicamente más y mejor desarrollado, pero ¿cómo es posible que en la tierra del sueño americano 50 millones de personas (una España entera) carezcan de atención sanitaria? ¿cómo es posible que la sociedad occidental más avanzada y por ende la más "progresista" sea la mayor proveedora de armas del mundo? ¿cómo es posible que en ese país los menores de 16 años tengan toque de queda impuesto por el gobierno? ¿cómo es posible que la violencia sea el problema número uno en el campo de la medicina mental? ¿cómo es posible que acerca de los derechos humanos Washington tenga mucho más de acusado que de fiscal? ¿cómo es posible que allí ejecuten la pena de muerte, una acto de injusticia humana y racial (el sistema judicial valora más la vida de los blancos que la de los negros) e inherentemente cruel y degradante? Y así un largo etcétera de preguntas sin respuesta, señales inequívocas de fracaso, que jamás serán contestadas. Que Dios bendiga a América.


--> Escuchando: Pink - "Dear Mr President"

martes, 4 de noviembre de 2008

Graffitis



Intentando ser fiel a mi diario virtual...un día nuevo, una post nuevo.
Habéis visto la foto ¿verdad? la saqué esta tarde en mi camino de vuelta a casa. He decidido llevar conmigo mi cámara fotográfica siempre que pueda. Es una manera original y fidedigna de presentar mis entradas. Se me ha ocurrido pensar en los graffitis como expresión artística y no como un acto de rebeldía adolescente como diría mi buena madre. Un pasadizo como este resulta asustadizo hasta para el más machote de la ciudad a altas horas de la noche; una luz tenue, un edor insoportable desprendido desde alguna apretada vejiga en un momento solitario, un ruido que parece seguir tus pasos sigiloso... ¡Venga ya! ¡Corta el royo! son las 8 de la tarde y una docena de coches circulan sobre tu cabeza, un abuelete acaba de adelantarte y el olor de días anteriores se lo han llevado las lluvias otoñales; ¡¡estamos en una galería de arte!! Seguro que nunca os habéis parado a contemplar detalladamente uno de esos dibujos que adornan nuestras paredes urbanas. Y seguramente nunca os habéis imaginado lo difícil que debe resultar darles forma. Qué importa si quien lo pinta lleva ropa ancha y no parece tener cara de buenos amigos. ¡Por favor! Su vestimenta es uno de los elementos básicos de la cultura que representa y su gesto busca desconfiado la amenaza de quién intenta prohibir la expresión de su arte. El blanco de las paredes nunca es impoluto y al igual que un buen cuadro decora tu cabeza sobre el sofá del salón, un graffiti, en el lugar adecuado, embellece y enriquece una ciudad.

--> Escuchando: DMX feat. Seal - "I wish"

lunes, 3 de noviembre de 2008

Inaugurar un blog


Esta es y siempre será la primera entrada de este mi nuevo blog. No he pedido permiso a nadie y ni si quiera sé por qué tengo la necesidad de escribir nada que nadie nunca (nunca digas nunca) no vaya a leer (vaya, menudo lio). Comenzaré hoy preguntándome por qué al empezar un blog, un diario, una carta que se nos haya ocurrido escribir de manera expontanea, tenemos que anunciar de forma oficial que lo estamos haciendo. Es como: "hola mundo, teniendo la certeza de que casi nadie llegará a leer esto, intentaré por vez primera llamar la atención de cualquiera que se encuentre cerca: ¡leed mi blog!" Y si nadie lo hace pocos serán los que aguanten en pie y continuen ordenando palabras que nadie leerá jamás (nunca digas nunca jamás). Por otro lado siempre puedes recurrir a tu nick del MSN o a esa casilla que pregunta acerca de tu página web (la que no tienes) en todos los formularios on-line para publicitarte de forma casi involuntaria y de paso hacerte el interesante. Es como: "hola, qué pasa, ¿sabéis que tengo un blog? oh vaya, ¿lo he dicho? lo siento, no quería alardear pero creo que lo que escribo es realmente interesante". Y lo peor de todo son las parrafadas insustanciales que se encuentran en la gran mayoría de todas esas páginas; por favor, el gratuito anonimato de lugares como este no tiene por qué transformarnos en aburridos, abúlicos y anodinos. Al contrario. Constantemente recurrimos a nuestra libertad de expresión; hagámoslo para que todos puedan oirnos y enseñemos al mundo nuestro pequeño punto de vista que para algunos será la única biblia que leerán en toda una vida.

--> Escuchando: The Verve - "This Could Be My Moment"